jueves, 19 de junio de 2008

Biofilia

¿Por qué cuando un hombre quiere conquistar a una mujer le regala flores?... y si no se las regala ella las compra en el mercado?... o incluso compra flores de plástico para adornar la casa?
¿Por qué el máximo cliché de dos personas enamoradas es un atadecer frente al mar? o las vacaciones soñadas en el caribe? ¿Por qué las más renombradas marcas de autos en el mundo usan como logo un animal (caballo, jaguar, muflón, etc)?
¿Por qué se nos hace necesario tener perros o gatos con nosotros en las ciudades?
¿Por qué los momentos más memorables en la vida está asociados a vacaciones en la playa, campo o montaña? , ¿que hace que siempre queramos explorar tierras nuevas?

Edward Wilson acuñó visionariamente el siguiente término en el año 1984: Biofilia
Biofilia es la tendencia innata del hombre de dirigir su atención a la vida y a los procesos vitales, es decir a la Naturaleza. Según Wilson, desde muy pequeños nos concentramos alegremente en nosotros y otros organismos (han visto lo entretenido que es para un niño ir al Zoológico?). Desde pequeños aprendemos a distinguir lo vivo de lo muerto y nos aproximamos a los seres vivientes igual como se acerca una polilla a la luz. Nos atrae lo diverso y lo novedoso. Ésto tiene todo el sentido del mundo y es cosa de observar a un niño mirando un árbol, gusano, caracol u hormiga. De alguna forma siempre nos llama la atención las criaturas de formas o hábitos extraños o quedamos embobados al mirar un gorila u orangután, y orcas que cazan lobos marinos.
Para mí lo más interesante que plantea el ilustre entomólogo son dos cosas:
1.- Nuestra propia existencia depende de este interés con el cual nacemos
2.- Según el grado de compresión que tengamos a cerca de otros organismos, los valoraremos más, y le daremos también más valor a nuestra propia existencia.

Un genio. Este viejito me cae muy bien. Él, a través de la observación de sus hormigas llegó a éstas y otras reflexiones de la Naturaleza en el Hombre. Esto, en mi humilde opinión sucede porque sensillamente la naturaleza nos habla.......
Cuando uno quiere tomar una decisión en la vida, no hay nada mejor que un retiro.... a la naturaleza. Cuando queremos clarificar o pacificar nuestra mente qué hacemos?: caminamos por la plaza o mejor aún por la playa, vemos una puesta de sol, escuchamos un río. Estoy convencido que la naturaleza tiene poderosa influencia en nuestra mente: la apacigüa, la ordena, la calma. Y cómo no!, si hemos evolucionado en ella!, y gracias a ella!, venimos de la naturaleza, es nuestra madre, y cuando tenemos problemas siempre volvemos donde la madre.

Tengo otro convencimiento: gran parte de nuestras enfermedades son producto de la falta de naturaleza. Muchas enfermedades son carencia de sonido de río, de sonido de follaje. Carencia de sol, de amaneceres y atardeceres. Carencia de canto de pájaros. Carencia mirar colores de la naturaleza. Carencia oler las flores y los árboles.
Lo opuesto a ésto es obviamente el exceso de ruido, el exceso de gris, exceso de luz de la ampolleta sin un ciclo normal y olor a fritanga.
Esto nos lleva a enfermarnos, a presentar mal humor, dolores de cabeza, úlceras gástricas, colon irritable, depresión, bipolaridad, cáncer y quién sabe qué enfermedad. Los tratamientos actuales para la depresión deberían incluir además de la fluoxetina: luz solar, caminatas hasta el atardecer, una hora diaria de sonido de río y otra del viento en los árboles. Olfateo de cada flor que se cruce (no es eso la aromaterapia?... que gotitas, hay que sali a buscarlas!).

La naturaleza en el hombre, entonces tiene poderes asombrosos en nuestro cuerpo y nuestra mente, y como consecuencia de estos nos mantiene sanos de las enfermedades modernas.
Digo enfermedades modernas provocadas por el exceso de ciudad y falta de naturaleza. Porque las enfermedades en sí no son malas. Las enfermedades son una forma de regular las poblaciones, son nuestros predadores que impiden que no seamos aún más plaga. Sin embargo, es distinto enfrentarse a una enfermedad en forma íntegra que hacerlo lacerado por esta carencia de naturaleza. ... me estoy desviando del tema pero es por mi desformación profesional.

Bien, si es cierto que la naturaleza tiene esos poderes en el cuerpo y la mente, ¿tendrá la misma influencia en nuestro espíritu?

1 comentario:

julián dijo...

algo así como....usted padece de hiperciudademia!!!!, me parece muy interesante....Los Mapuches, la Ayurveda, La medicina tradicional China, el Reiki, en fin...las medicinas "alternativas" y todas las formas de vida que pretenden mantener un equilibrio físico, psíquico y espiritual, parten de ese equilibrio al que tú apelas...hombre-naturaleza..Otro "leit motiv"....otra forma de felicidad..más austera, más respetuosa, viendo al hombre como una parte integrante de éste GRAN universo..y no al universo como una creación al servicio del hombre...
Seamos optimistas...educación, difusión, sensibilización.....Esa es la tarea.

Buen blog, un abrazo amigo.